Orar con el Diario de Sor Santa Faustina: La Divina Misericordia en mi alma.

Sábado, 01/10/2022: «La esencia de las virtudes es la voluntad de Dios».  

 

 

1. ORACIÓN INICIAL
ORACIÓN AL ESPIRITU SANTO (Cardenal Verdier)

2. LECTURA

“La esencia de las virtudes es la voluntad de Dios; quien cumple fielmente la voluntad de Dios, se ejercita en todas las virtudes. En todos los casos y todas las circunstancias de la vida adoro y bendigo la santa voluntad de Dios.  La santa voluntad de Dios es el objeto de mi amor.  (124) En los más secretos rincones de mi alma vivo de su voluntad y por fuera obro en la medida en que conozco interiormente que tal es la voluntad de Dios.  Los tormentos, los sufrimientos, las persecuciones y todo tipo de contrariedades que vienen de la voluntad de Dios, me son más agradables que los éxitos, los elogios y las alabanzas que vienen de mi voluntad” (Santa María Faustina Kowalska, Diario, La Divina Misericordia en mi alma, Diario 678).

(Después de la lectura, observar unos cinco minutos de silencio orante: para que este mensaje entre en nosotros e ilumine nuestra vida. En este silencio, cada uno de nosotros ha de situarse en el relato que hemos escuchado y reflexionar personalmente, sentir y gustar lo que el Señor te quiere comunicar a ti en este momento para ayudarte en la meditación y en la oración). Preguntarte: ¿Qué me quiere decir el Señor hoy, a mí, personalmente? (Silencio).

A continuación, compartir en grupo, en familia o meditar personalmente

3. PREGUNTAS DE REFLEXIÓN

  • ¿Qué entiendo por “voluntad del Señor”?
  • ¿Qué tiene que ver la voluntad del Señor con las virtudes?
  • ¿Por qué estamos invitados a hacer la voluntad del Señor?
  • ¿Por qué muchas veces hago muchas grandes maravillas con éxito, pero nunca tengo paz interior ni felicidad?
  • ¿Qué virtud me falta y que me impide ser obediente a la voluntad del Señor?
  • ¿Por qué me gusta siempre vivir con grandes éxitos sin saber si vienen de Dios y me frustro con facilitar ante cualquier contrariedad de la vida?
  • ¿Qué actitud debe guiar mi caminar y mi crecimiento espiritual?

4. ORIENTACIÓN (Comentario)

  • Muchas veces pensamos que la voluntad del Señor amenaza nuestra libertad, pero nos olvidamos que nuestra “libertad” es también “nuestra debilidad”. La voluntad del Señor es que nosotros seamos felices.
  • Las virtudes elevan el alma a la cumbre de la santidad. Lo que no es conforme a la voluntad del Señor no puede ser bueno para los hijos de Dios.
  • El Señor dijo: “Sin mí no podéis hacer nada” (Jn 15,5). Las virtudes nos ayudan a estar junto al Señor y a hacer todo en su Nombre, para su Gloria y bien de las almas.
  • Todas las acciones nuestras que no son conformes a la voluntad del Señor no significan nada ante Él, tan sólo son fruto de nuestra soberbia humana. Muchas veces actuamos para ser alabados y aplaudidos, queriendo satisfacer nuestro “ego”. Hoy el Señor nos invita a ponerle en centro de nuestra vida, reconociendo que tan sólo somos instrumentos suyos quien realmente ha de obrar en nosotros.
  • Sin la humildad, sin la sencillez ni la confianza en el Señor, no podemos veros tal como Dios nos ve y tampoco permitiremos que el Espíritu Santo obre en nosotros.
  • Muchas veces el Señor permite las contrariedades para ayudarnos a crecer en su presencia con serenidad y sin miedo. Jesús vivió en nuestra tierra haciendo el bien, pero fue rechazado por el mundo; si el mundo nos rechaza, hemos de reconocer que Jesús fue el primero que el mundo rechazó.
  • Hoy el Rey de Misericordia nos invita a vivir desde una verdadera infancia espiritual, con confianza y con serenidad, porque Él mismo camino con nosotros; tan sólo quiere que seamos obedientes a su santa voluntad.

Consejos:

Hacer el esfuerzo de ejercitar la docilidad y el abandono a la voluntad de Dios, basados en la fe y la confianza; dejar a Dios actuar en nuestras vidas y en nuestro corazón reinará la serenidad, la alegría y la paz de saber que somos todos de Él. 

Propósitos de hoy:

COMPARTIR EN GRUPO, EN FAMILIA O MEDITAR PERSONALMENTE (Reflexionar personalmente, sentir y gustar lo que el Señor te comunica a ti en este momento para ayudarte en la meditación y en la oración.) (SILENCIO) En el silencio del corazón, meditemos las frases o palabras que nos han llamado la atención de manera personal, y descubramos con la luz del Espíritu Santo: ¿Por qué esa palabra o frase me ha tocado a mí? ¿Qué me quiere decir el Señor hoy, a mí, personalmente?

5) PRECES y ACCIÓN DE GRACIAS (INTENCIONES LIBRES)

  • Pedir la gracia de reconocer que la humildad es un requisito indispensable para la salvación,
  • Pedir la gracia de ser dóciles a la voluntad del Señor, sabiendo que todos somos de Él.
  • Orar por los soberbios que confían en sus propios éxitos sin saber que todo viene del Señor y que sin Él no podemos hacer nada.
  • Orar por la paz en Colombia y en los países en conflicto.
  • Por las intenciones de la Virgen María,
  • Por las almas del purgatorio,
  • Por nuestra humidad doliente y por nuestras intenciones personales.

 

  • Padre Nuestro
  • Ave
  • Gloria

6. ORACIÓN FINAL:

Oh Jesús, tendido sobre la cruz, Te ruego, concédeme a gracia de cumplir fielmente con la santísima voluntad de Tu padre, en todas las cosas, siempre y en todo lugar.  Y cuando esta voluntad de Dios me parezca pesada y difícil de cumplir, es entonces que Te ruego, Jesús, que de Tus heridas fluyan sobre mi fuerza y fortaleza y que mis labios repitan:  Hágase Tu voluntad, Señor.  Oh Salvador del mundo, Amante de la salvación humana, [tú] que entre terribles tormentos y dolor, Te olvidaste de Ti Mismo para pensar en la salvación de las almas, compasivísimo Jesús, concédeme la gracia de olvidarme de mi misma para que pueda vivir totalmente por las almas, ayudándote en la obra de salvación, según la santísima voluntad de Tu Padre. Oh Mi Buen Jesús Misericordioso, Rey de Misericordia, confío en Ti y solo en Ti espero. Amén. ¡JESÚS, EN TI CONFÍO! (cf. Diario 1265).

 

 

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«Y no hay alma que no tenga el deber de orar,  porque toda gracia fluye por medio de la oración»  (Diario 146).

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