Hora de la Divina Misericordia: 3:00 p.m., sábado, 18 de marzo de 2023

Reflexiones diarias, súplicas y oraciones

Sábado, 18 de marzo de 2023

1. Reflexión

Hoy escuché en el alma una voz: Oh, si los pecadores conocieran Mi misericordia no perecería un número tan grande de ellos. Diles a las almas pecadoras que no tengan miedo de acercarse a Mi, habla de Mi gran misericordia. 

El Señor me ha dicho: La pérdida de cada alma Me sumerge en una tristeza mortal. Tú siempre Me consuelas cuando (36) rezas por los pecadores. Tu oración que más Me agrada es la oración por la conversión de los pecadores.  Has de saber, hija Mía, que esta oración es siempre escuchada (Santa María Faustina Kowalska, La divina Misericordia en mi alma, Diario 396-397).

2. Súplicas:

  • Pidamos la gracia de alegrarnos siempre por la conversión de los demás.
  • Oremos por la conversión de nuestros familiares y de los que están bajo la influencia del maligno.
  • Por nuestra humanidad doliente,
  • Por las almas del Purgatorio,
  • Por las intenciones de la Virgen María,
  • Por nuestra Santa Iglesia Católica,
  • Por nuestras intenciones personales

3. Propósitos del día:

Orar en el día de hoy por la conversión de una persona  o de una familia en concreto. 

4. Oración Final:

Oración por la conversión de un ser querido

Oh Jesús, paz y descanso mío, Te ruego por la conversión de (nombrar ….), ilumina su vida para que cambie interiormente, sosten su destino con Tu gracia fuertemente para que también ella (él) llegue a la perfección. Oh Mi Buen Jesús Misericordioso, Rey de Misericordia, confío en Ti y solo en Ti espero. Amen ¡JESÚS, EN TI CONFÍO!

Libro correspondiente a estas reflexiones: Disponible aquí.

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Testigos de la Divina Misericordia Autor

En nuestro grupo, tenemos la devoción a Jesús de la Divina Misericordia y veneramos a la santísima Virgen María (Reina de la paz). Ante la mirada de nuestro Dios y para el bien de los demás, nos reunimos como un grupo de oración e intercesión, porque, nos inspiramos del pasaje de Mc. 2, 1-12 (curación de un paralítico). En todo, buscamos la gloria de Dios y bien de las almas. Formamos a los hermanos del mundo entero a la Consagración a la Divina Misericordia. Las puertas de nuestra familia están abiertas a quien siente la llamada a servir al Señor como Testigo de la Divina Misericordia y militante por el Triunfo del Inmaculado Corazón de María.